Cuando la ceremonia del podio resulta más parecida a un velatorio antes que a una celebración, es que algo ha ido mal. Cuando ninguno de los 3 integrantes del podio muestra sonrisa alguna y tenga que ser Adrian Newey quien suba a recoger el trofeo del constructo, algo definitivamente no funciona. Y cuando una carrera es entretenida por las conversaciones por radio, los piques entre compañeros de equipo y las gañanadas en los boxes, es que hay gente que no está contenta.
Principalmente Mark Webber. El «segundo» piloto de Red Bull fue atacado inmisericordemente por Sebastian Vettel cuando ambos enfilaban el tramo final de carrera con las posiciones bien definidas. El alemán, haciendo caso omiso a las órdenes de equipo, llevó al límite su ansia de trinufo y tras dos vueltas de infarto, con defensa muy agresiva de Webber incluida, y le rebasó. El alemán sabe que hizo algo mal y pidió disculpas (o fue obligado a ello). Pero no quita para que el cabreo del bueno de Mark, quien le recriminó en el antepalco del podio que la orden era «Multi 21», entendiendo como «Mantener posiciones coche 2 (Webbo) coche 1 (Frigodedo)
La otra persona ocupante del podio tampoco parecía feliz. Lewis Hamilton subió a su primer podio con Mercedes con polémica. En ese último tramo de carrera, Nico Rosberg, compañero de equipo del inglés, llegaba como un misil y le hubiese pasado por encima de no frenarle el equipo. Tras varios intentos de adelantarle, con o sin permiso, la radio del equipo alemán bramó con un «Esta os la guardo» que dejó patidifusos a los empleados de Mercedes y desorinados de risa al resto del mundo.
Vale. Tema estrella. Órdenes de equipo. Personalmente, estoy en contra. Las luchas deben ser limpias, de tú a tú sin fijarse en si es tu compañero de box o no. La cosa es que la FIA ha permitido que existan las órdenes de equipo. Pero los equipos, en un alarde de rizar el rizo, quieren mantener la ilusión de que no existen y realizan autenticos equilibrios dialécticos para que lo que dicen no sea demasiado evidente. Y por ahí no paso. Si la orden existe, se debe dar claramente y no jugar al despiste.
Por lo demás, carrera divertídisima, a lo autos locos, con menos protagonismo del elemento meteorológico del esperado. Muchas alternativas en la primera posición y cachondeo en los boxes con las paradas eternas de Force India y la equivocación de Lewis Hamilton al parar en el box McLaren, recordando otros tiempos.
La carrera de Alonso…. bueno. Más bien la vuelta de Alonso fue para olvidar. Un toque con el alerón trasero de Vettel en la primera curva desprendió parte del alerón delantero de su Ferrari y luego, en una decisión MUY arriesgada, y a toro pasado, no entró en el pit confiando en que el alerón no estuviese tan dañado. Resultado: Si llega a salir bien, estaríamos hablando de decisión valiente y arriesgada que sale bien. El problema es que a final de recta de meta, un bache mal parido desprendió del todo el alerón y provocó que Alonso tuviese que abandonar. Y muy cabreado, por cierto. Sin hablar con nadie.
Proxima en 15 días en China.
EL BUENO: DESIERTO. Increible, pero no encuentro a nadie que lo hiciese tan bien como para destacar.
EL FEO: FORCE INDIA: Dos paradas en box in-fa-mes. Pero de las de minuto largo. Solo faltaba que saliese alguien del box con una bata a darle el presupuesto de la avería al piloto. De taller de barrio del extrarradio.
EL MALO: SEBASTIAN VETTEL: Salir con una disculpa de mierda despues de hacer semejante putada da la muestra del carácter del actual campeón del mundo. Nunca me ha parecido ejemplo de nada, y despues de esta, me mantengo: Piloto que solo sabe correr sin nadie en el horizonte y que ha tenido la enorme suerte de encontrar un monoplaza que durante tres años ha meado (literalmente) al resto de la parrilla. Y para una vez que le dicen que se esté quieto….
EL CRACK (por petardazo): RED BULL RACING: Los trapos sucios se lavan en casa. Pero la barrabasada de Vettel merece algo más que un tirón de orejas. Mark Webber ha estado más de una vez y más de dos metido en una similar y ha hecho lo que «debía»: Esto es, tragar y callar pensando en su futuro laboral. Y el estatus de campeón del mundo dentro de un equipo, y menos aún, en la pista. no disculpa ningún comportamiento así. Y más si te lo ordenan. Asi que si fuese un equipo serio, tocaría broncón público muy muy serio.