La Comunidad Valenciana arde. Desde el sábado, una serie de incendios están devastando el interior de la región levantina. Y muchas personas, anónimas todas ellas, llevan todo este tiempo luchando contra el fuego y/o evitando que el mal sea mayor. Gente como tú que me lees, o como yo. Y ayer, leyendo y viendo las celebraciones de la selección española tras ganar la Eurocopa, me queda el regustillo amargo de que siempre se celebran cosas en los peores momentos.

Porque hay gente que está muriendo haciendo un trabajo ingrato. Un trabajo que consiste en patear monte, respirar pavesas y jugarse la vida por un sueldo. Y no estamos hablando de un sueldo digno sino más bien de un salario que permite salir adelante. Y punto. Y viendo a los 23 jugadores de la selección haciendo el gañán solo se me ocurria comparar sus primas por ganar el título (muy loable alcanzar los límites que se han alcanzado en su profesión, las cosas como son) comparadas con las tareas que hacen estos casi-voluntarios y la relación curro-peligrosidad-recompensa. Y adivinad quien gana. Por goleada. Y no juegan al fútbol.

Están cayendo chuzos. El país está hecho unos zorros. Que el fútbol es la anestesia de la sociedad no es algo que tenga que recalcar. Pero últimamente, el concepto «héroe» se está pervirtiendo. Un deportista no podrá ser un héroe comparado con estas personas anónimas que ponen todo de su parte. Y mientras otros «solo» compiten en eventos internacionales defendiendo una «honra» que no vale nada, comparada con el trabajo y esfuerzo de esta gente lo da todo para que otras personas puedan dormir en su casa, seguros y a salvo. Pero esto último no es lo importante. No. Lo importante para nuestros políticos y representantes es plantarse en ese evento deportivo a 5000 kms de distancia para hacerse la foto.

Y este país no necesita fotos. Este país no necesita recortes anunciados mientras la selección juega, con alevosía. Este país no necesita representantes que se esconden mientras nos está cayendo la del pulpo. No necesitamos a nadie cuya única solución a todos los problemas sea pedir fondos de rescate para que los amiguetes del gobierno salgan con el riñón forrado despues de haber especulado, matado, quemado, estafado y violado. No. Ni siquiera los jugadores de fútbol tienen la culpa de ser los gladiadores del circo que se tiene montado en este país para tenernos atontados durante el mes de Eurocopa, no.

Estoy seguro que nos iría bastante mejor con las gentes que luchan contra los incendios dirigiendo los designios de este país. Por lo menos, ellos saben lo que es jugarse todo por los demás. Y para mi, son los verdaderos héroes de este país. Gracias a todos ellos.