Bueno.

Estamos. Que no es poco.

Que nadie malinterprete esta entrada. Sigo estando hasta el cuello de mierda. Lo que pasa es que he decidido girarme. Antes estaba boca abajo, ahora estoy boca arriba.

Más de veinte días después he decidido recuperar el ciclo normal de vida, y que todo permanezca en su ámbito. Lo laboral, lo profesional, lo lúdico y lo sentimental. Compartimentado, cada cosa en su cubículo y a poder ser, que todo vuelva a la normalidad. Por lo pronto, hoy toca basket. Mañana, si saco un rato, toca entrada que llevaba tiempo madurando.

reboot