No lo voy a negar. La revolución del smartphone mola. No voy a entrar en que si Aifones, Androides, Maemos o cualquier cosa que se use. El hecho de estar perdido en medio de la nada y seguir accediendo a tus servicios web mola que te cagas. Hoy mis pensamientos van dirigidos a la parte del hardware que es la que veo como eslabón más débil en toda la cadena: la batería.
El primer móvil al que tuve acceso fue un Alcatel One Touch Easy DB. Un monstruito de cacharro disfrazado de terminal portable más que de móvil principalmente. Pero en el que la carga duraba una semana larga y el ponerlo a cargar era un acontecimiento familiar. Mi primer móvil propio (y aquí es donde empieza mi idilio con Nokia) fue un 3310. Sencillo, funcional y al que la carga también le duraba sus buenos 5 o 6 días. Al de un tiempo, evolucioné a un 7250i. Pantalla a color, cámara… mi primer móvil social, por así decirlo. Pero insisto, la batería permanecía funcional otra semanita. Y mi última adquisición, antes de pasarme a un smartphone propiamente dicho, fue un Nokia N81. Con marcas de aguante de batería de 5 días.
Los dos smartphones que he tenido (HTC Tattoo y Google Nexus One) comparten una característica común en el aspecto que nos ocupa. La batería no dura más allá del día, día y medio. Sin usarlo intensivamente, sin actualizaciones automáticas ni sincronizaciones automáticas. Lo cual, me lleva a andar pendiente siempre de tener cargador, cable USB o cargador en el coche a mano.
Y este es en mi opinión el cuello de botella y por donde se deberían orientar los tiros en el desarrollo de hardware nuevo. Vale, no estoy hablando de una batería que permita estar todo el día conectado viendo video y consultando el correo mientras tengo el GPS activo, pero algo que permita a los usuarios algo más de cancha. Y el caso es que no sé como está el estado de la tecnología en estos momento.
¡Pijo!
Uy lo que me ha dicho…
Yo con las push notifications activas y el Bluetooth siempre encendido se me queda en el día y medio también. Hace tiempo que yo comentaba que el tendón de aquiles de los smartphones era las baterías. Por lo menos el iPhone va mejorando en ese aspecto. De todas maneras te recomiendo que intentes mirar todos los ajustes por si puedes apurarle un poco más la batería y eso si, cuidarla como recomiendan con cargas y descargas completas cada cierto tiempo.